La semana pasada hablamos de la importancia de los flujos de caja para las comercializadoras y muy vinculados a estos, hoy hablamos de las necesidades financieras.
Dentro de esta previsión debemos incluir, además de los costes de adquisición de la energía que pagamos en las respectivas liquidaciones de OMIE y REE (sin olvidar las facturas de Distribuidora), nuestra previsión de garantías ante ambos operadores.
Siendo este uno de los afectos más críticos para la supervivencia de las comercializadoras, llegando en ocasiones a suponer 5 veces el volumen de negocio de la misma.
Desde Asicxxi ponemos diferentes herramientas a disposición de nuestros clientes para hacer frente a esta planificación. Veamos algunas pinceladas de ellas.
Garantías de OMIE
Dentro de nuestra aplicación BOMP, nuestro cliente puede encontrar una pantalla de garantías del operador del mercado. Con su volumen de compra actualizado, previsión de precios a corto plazo y el comportamiento de sus garantías hasta su liberación con el pago.
Además de ser una foto actualizada de sus garantías de OMIE, esta pantalla es una calculadora interactiva que permite al cliente ver como se comportan estas garantías ante variaciones editables:
• Variar su volumen de compra previsto
• Cambiar las previsiones de precio
• Ajustar el precio de oferta
• Simular el cambio ante Prepagos o Incrementos de garantías.
Garantías de REE
Mucho más complejas en sus cálculo y previsión, las garantías de REE suele ser la parte más critica de una comercializadora en cuanto a necesidades de financiación. Teniendo en cuenta desvíos, volumen de compra, cartera asignada, precios de mercado y precios de desvió, AsicXXI realizar previsiones y seguimiento de estas garantías. Dando margen a la comercializadora a planificarse para hacerles frente.
Todos los meses nuestros clientes reciben su previsión de Garantías de Operación Adicional (GOA) a 12 meses vista, teniendo en cuenta su desvío y su previsión de crecimiento.
Además, desde la aplicación también consultar su % de Riesgo en garantías diarias y realizar proyecciones de cómo se desarrollarán hasta el día de liquidación. Manteniéndolo siempre por debajo del 80% en seguimiento normal o 60% si se encuentra en seguimiento estricto.